Cuando el Crepúsculo cae y avanza la oscuridad de la noche, a veces, las palabras se entremezclan, se confunden los recuerdos, se entrecortan frases y se superpone palabra sobre palabra en confuso revoltijo, pero sobre y detrás del cúmulo de escombros arrastrados por el día, aún las ideas están claras, la voluntad y el deseo con todo su vigor nos muestran nuestra verdad.
Pueden confundirnos pero, aún, nuestras ideas son claras, las que inspiran confusas palabras, son ideas que guían nuestra devenir en la vida para ser, y en tanto ser quienes somos afirmar nuestra voluntad.
Hoy mis recuerdos me acercan, no se cómo, ni de dónde, estas palabras…
....
Y entre “nosotros”, hay que levantar, hay que levantar,
Sobre la cueva una casa, sobre el erial un paisaje, y
al amigo que está lejos atraerlo de la mano…
Entre todos hay que levantar, una esperanza segura…
Entre todos hay que levantar, de toda la tierra entera,
un lugar en el que quepan, los que caminan y esperan, los que vuelven y se quedan,
y si alguien queda parado decirle que es caminante.
Y entre todos hay que levantar,... mucho hay que levantar.
El original, José Antonio Labordeta “No cojas las acerollas déjalas para el verano”.
(acerolla: fruto del acerollo ó serbal doméstico – sorbus domestica)
(acerolla: fruto del acerollo ó serbal doméstico – sorbus domestica)
Por que aún es clara y vigorosa la idea de que queda mucho por hacer.
Esta foto del paisaje me trae recuerdos. Recuerdos sobre momentos en que ha habido caminos que me hubiera gustado recorrer y que por causas ajenas, no digo si positivas o negativas sino ajenas, dejamos sin pisar. ¿Estaría haciendo yo un duelo por la pérdida del deseo truncado sobre el camino no recorrido y lo que hubiese vivido?
ResponderEliminaresta es mi flor.
ResponderEliminarMarta